Inicio

The infanta María Josefa: a controversial dermatological expression in art

Paulina Nundehui Cortés-López1 y Roberto Arenas2

1 Médico pasante de Servicio Social, Sección de Micología
2 Jefe de la Sección de Micología
Hospital General Dr. Manuel Gea González, Ciudad de México

Francisco José de Goya y Lucientes fue un pintor español nacido en Fuendetodos, municipio de la provincia de Zaragoza, en el año de 1746.1,2 Las obras de Goya incluyen 500 óleos y murales, de éstas rescatamos en esta ocasión La familia de Carlos IV, pintada en 1800. En esta obra analizamos dermatológicamente a la infanta María Josefa de Borbón y Sajonia, entre otros miembros de la famosa familia3 (figura 1).

Es una obra al óleo sobre lienzo que se encuentra en el neoclasicismo y forma parte de uno de los 10 bocetos que Goya pintó en Aranjuez (figura 2). María Josefa trae consigo la banda de la orden de Damas Nobles de la reina María Luisa, y sobre el pecho porta el borrón negro que sólo recibían las damas de la familia real española. Una pluma de ave del paraíso adorna su cabello.3

Si miramos detenidamente la región temporal derecha encontramos una mácula de color marrón oscuro con pigmentación uniforme y bordes bien delimitados, de aproximadamente 5 cm de diámetro que podría corresponder a un lentigo solar (figura 3), éste predomina en personas con fototipos i y ii, así como en edades avanzadas, como es el caso de la infanta.

Otra posibilidad es una neoformación queratósica pigmentada compatible con una queratosis seborreica plana (figura 4), dada la localización que tan a menudo se observa en la región facial.4,5 También nos inclinamos a pensar, como otros lo han hecho, en una neoformación pigmentada plana, que en 1995 White6 refirió que probablemente se trataba de un melanoma del tipo lentigo maligno. Esta probabilidad cobra fuerza al mencionar que la infanta falleció un año después de realizada la pintura, aunque la propia edad puede justificar su muerte.7

Figura 1. La familia de Carlos IV (óleo sobre lienzo, 280 × 336 cm).
Figura 2. María Josefa de Borbón y Sajonia, infanta de España (óleo sobre lienzo, 72 × 59 cm).

 

Figura 3. Lentigo solar.
Figura 4. Queratosis seborreica plana.


En la página oficial del Museo del Prado (lugar donde se exhibe esta obra) se menciona que lleva un lunar postizo sobre la sien, en ese entonces ya pasado de moda.7,8 La interpretación de detalles específicos en una obra de arte puede ser subjetiva y, a veces, sujeta a múltiples perspectivas. Así, esta lesión pigmentaria podría convertirse en una ventana hacia la complejidad del ser humano, un testimonio gráfico que desafía nuestra percepción y nos conduce a reflexiones más profundas sobre la conexión entre el arte y la piel.

Este órgano podría estar revelando una historia que va más allá de las tendencias de la moda, dándonos la oportunidad de explorar las historias más personales y profundas que la pintura tiene la capacidad de despertar.

Bibliografía

  1. Padberg M, La peinture espagnole, Éditions Place des Victoires, Louvre, París, Könemann, 2018.
  2. Museo Nacional del Prado, Goya y Lucientes, Francisco de, 2023. Disponible en: https://www.museodelprado.es/coleccion/artista/goya-y-lucientes-francisco-de/39568a17-81b5-4d6f-84fa-12db60780812.
  3. Museo Nacional del Prado, La familia de Carlos IV, 2023. Disponible en: https://www.museodelprado.es/coleccion/obra-de-arte/la-familia-de-carlos-iv/f47898fc-aa1c-48f6-a779-71759e417e74.
  4. Elias-Armas K, Bordelois-Abdo J, Elias-Sierra R et al., La pintura como medio de enseñanza-aprendizaje de las enfermedades de la piel, Folia Dermatológica Cubana 2021; 14.
  5. Souza EM y Vallarelli AFA, Dermatologia nas artes, An Bras Dermatol 2009; 84(5):556-8.
  6. White LP, What the artist sees and paints, West J Med 1995; 163(1):84-5.
  7. Museo Nacional del Prado, María Josefa de Borbón y Sajonia, infanta de España, 2023. Disponible en: https://www.museodelprado.es/coleccion/obra-de-arte/maria-josefa-de-borbon-y-sajonia-infanta-de-espaa/80dbd1d3-6f51-423d-ae59-93efbf85686f.
  8. Campos-Macías P, La familia de Carlos IV (segunda parte), Dermatol Rev Mex 2023; 67(6):888-92.